Una de las levadas más hermosas de Madeira. A lo largo del sendero se maravillará de la luz y las sombras que se filtran a través de la Laurissilva y del brezo.
Verá las truchas que nadan en la cascada que acompaña al sendero, que se esconderán según perciban su presencia. Al ir acercándose a Lamaceiros, las vistas de Porto da Cruz y de la Peña del Águila en la lejanía son casi de otro mundo.
Un paseo que no debe perderse.